El cantautor Joaquín Sabina manifestó abiertamente su poca afinidad con Julio Iglesias, de quien aseguró que vendía chorizos.
El jienense no es precisamente un admirador de la familia Iglesias y así lo ha dejado ver cada vez que tenía ocasión.
Posteriormente llegó a decir que le fascinaba Isabel Preysler porque tenía “ojos diabólicos”.