El actor y director australiano Mel Gibson es un tipo bastante peculiar.
Tanto que el protagonista de ‘Braveheart’ rehúye el pollo a la hora de comer porque afirma que le hace crecer el vello del pecho.
Una manía sorprendente si se tiene en cuenta que el intérprete gusta de alardear sobre su masculinidad y suele dar vida a ‘tipos duros’ en el mundo del celuloide.