El llamado ‘Pozo de Jacob’ está situado en la localidad de Wimberley (Texas, EE.UU) y actualmente está considerado uno de los lugares más peligrosos para bucear de todo el planeta, ya que en los últimos años se ha cobrado la vida de hasta ocho personas.
Se trata de un pozo manantial artesiano perpetuo que alimenta el río de Cypress Creek que llama la atención por su pequeño tamaño, ya que la boca de su muelle únicamente tiene cuatro metros de ancho, mientras que la profundidad media de su agua alcanza los diez metros.
Sin embargo, cuenta con un peligroso sistema de cuevas que lo convierte en un gran atractivo para multitud de buzos aficionados de todo el mundo. No en vano, se trata de una de las mayores cuevas submarinas del estado de Texas, con una zona que llega en algunos de sus puntos a los 40 metros de profundidad.
Por ello es una de las zonas que en los últimos tiempo se ha popularizado entre los amantes de las emociones fuertes; aunque la mayoría de personas se limitan a disfrutarlo como una simple piscina natural.
(ami.com)