No. Fue un lugar mítico, fuente de incalculables riquezas con calles pavimentadas de oro, que muchos exploradores españoles e ingleses que participaron en la conquista de América del Sur buscaron sin éxito durante mucho tiempo.
La leyenda surgió a partir del año 1530, cuando los relatos que contaba el conquistador Gonzalo Jiménez de Quesada tras su periplo por las montañas de la actual Colombia se mezclaron con numerosos rumores a su llegada a Quito.
Innumerables expediciones se organizaron para tratar de encontrar este sitio fantástico (que no estaba claro si era una ciudad o todo un reino), pero ninguna consiguió su objetivo, costando incluso la vida a muchos que lo intentaron.