Sí. La humanidad ha buscado durante siglos la fuente de la eterna juventud sin éxito.
Aunque en los últimos años ha descubierto a un animal al que puede intentar emular.
Se trata de la especie de medusa ‘Turritopsis nutricula‘, un hidrozoo de solo medio centímetro de longitud que no muere al alcanzar el estado adulto.
Cuando llega a esta etapa es capaz de volver a una fase juvenil (de pólipo), repitiendo así su ciclo vital durante infinitas veces.
Esto ha provocado que los científicos estén investigando su biología para intentar extraer aplicaciones útiles para el ser humano.