En los últimos días un vídeo protagonizado por un labrador negro ha conquistado el corazón de miles de personas. Y es que Duke fue un animal que fue adoptado por la familia estadounidense Roberts hace tres años, pero solo un año después cayó enfermo al detectársele un osteosarcoma, un cáncer muy agresivo que afectaba a sus huesos. En un primer momento se le amputó una de sus patas delanteras, pero la enfermedad continuó progresando hasta entrar en fase terminal. Por ello, sus propietarios decidieron sacrificarlo tras dormirlo, aunque antes le prepararon una despedida única. En la celebración no faltaron la comida, los mimos y los juegos, además del trabajo del fotógrafo profesional Robyn Arouty, quien se encargó de inmortalizar estos inolvidables momentos. Tras este magnífico último día la familia Roberts elaboró un precioso vídeo en el que narran los sentimientos del animal de forma cronólogica y lo subieron a ‘Youtube’, donde tardó pocas horas en convertirse en viral. Puedes disfrutar de él a continuación. (Valium)