Los antiguos egipcios no solo fueron pioneros en multitud de aspectos como la ingeniería o la astronomía, sino que también destacaban por su cuidada higiene.Así, era habitual que las mujeres usaran prehistóricas cremas depilatorias elaboradas con sustancias como la sangre de tortugas, gusanos o incluso la grasa de hipotótamos. Además, también empleaban ceras compuestas de azúcar, agua, limón, aceite o miel. Todo para conseguir un cuerpo libre de pelo, más allá de los de la cabeza. Por su parte, los hombres también se sometían a depilaciones, especialmente los sacerdotes. Para ello empleaban rudimentarias navajas hechas de sílex, aunque posteriormente éstas serían fabricadas con cobre y con hierro.