¿Sabías que antes las porterías de futbol no tenían redes?

¿Sabías que antes las porterías de futbol no tenían redes?

Hace muchos años las porterías no eran como lo son en la actualidad, e incluso según algunos documentos, hasta su forma y tamaño fue cambiando. Pero poco a poco fueron evolucionando hasta convertirse en lo que son ahora.

Pero uno de los datos más curiosos es que las porterías de futbol no tenían redes. Entonces, ¿Cómo hacían para saber si realmente entró el balón? Conozcamos las circunstancias que llevaron a modificar las porterías hasta el modelo que utilizamos en la actualidad.

 

Resumen de la historia de las porterías

Según algunas literaturas, en un momento de la historia las porterías fueron solo dos pilares y un travesaño. Debido a la ausencia de un material que pudiera retener el balón dentro del área, en ocasiones lo árbitros tomaban decisiones incorrectas al momento de declarar un gol.

Todo esto cambió gracias a John Alexander Brodie, quien dio la idea de que esta red podría lograr que el trabajo el árbitro fuese más objetivo. Pero no fue hasta el 1891 cuando la Football Association aceptó probar este método en un partido.

Lo interesante del caso es que los medios de información del momento definían esta invención como poco efectiva. Pero esto se debía a que eran muy conservadores y cualquier modificación les parecía mal.

Sin embargo, un año después cuando se disputaba una final entre el Aston Villa y el West Bromwich, fue que se logró apreciar la relevancia de esta red en un partido. Así que desde ese momento se empezaron a utilizar redes para las porterías en el resto de encuentros.

 

Mitos sobre cómo se inició el uso de las redes en las porterías

Cuenta una leyenda que en algún lugar de Nottingham, unos pescadores estaban secando una red en una portería de fútbol, ​​y los jugadores que acudían al lugar disfrutaban mucho clavando la pelota en ella.

Esto se debía a que era mucho más cómodo sacar el balón de la red cuando un jugador anotaba un gol, ya que habitualmente tenían que recorrer largas distancias para ubicar el balón después de la anotación.

Por lo tanto, era mucho más agradable no tener que correr para buscar la pelota, sino sacarla rápidamente de la red.

Aunque esta historia no ha sido corroborada, es interesante pensar que el origen del uso de redes en las porterías del fútbol se pudo iniciar de esta forma.

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