A Leo Messi, tanto este año como el curso pasado, le toca ver los mejores partidos de fútbol desde el sofá. Ya van dos años seguidos en los que el Barça no pasa de cuartos de final en la Champions, y en gran parte es culpa de Messi, teóricamente el jugador más decisivo del conjunto azulgrana, pero que se ha acostumbrado a desaparecer en las grandes citas, cuando su equipo más le necesita…
Al pobre Messi le tocará ver desde la televisión como el Real Madrid disputa una nueva final europea, y en particular, Cristiano, que en 2016 conquistó Champions y Eurocopa, y le arrebató el Balón de Oro y todos los trofeos al argentino.
Cristiano Ronaldo tiene el Balón de Oro 2017 en el bolsillo, y tras ganar la Liga con el Real Madrid, un buen partido en Cardiff dejaría el galardón todavía más sentenciado. Mientras tanto, Messi se quedará con las manos vacías, aunque su club, el Barça, todavía aspira a la Copa del Rey, un trofeo que en el caso de ganar, el conjunto blaugrana ya ha dicho que no celebrará…
Messi es una sombra de lo que fue; Cristiano sigue siendo el más grande, y no se conforma. Tras los 5 goles al Bayern y el hat-trick al Atlético, CR7 apunta ahora a la Juventus y a Buffon. ¡A por ellos Cristiano, a por la Duodécima!