¿Qué es el fútbol de pantano?

Popularmente se conocen diversas superficies para jugar al fútbol, donde destacan la grama, la tierra e incluso superficies rígidas como en el caso del fútbol de salón. Pero hay una modalidad poco conocida que llama poderosamente la atención por las características de resistencia que implica: el fútbol de pantano.

Como su nombre lo indica, el fútbol de pantano es una modalidad donde el terreno de juego tiene características lodosas; es decir, no se trata de una superficie compacta sobre la cual desplazarse, sino que literalmente se juega en pantanos donde los pies de los jugadores pueden quedar sumergidos hasta una profundidad bastante significativa.

Esto requiere que se emplee mayor esfuerzo a la hora de desplazarse, debido a que cada paso es más forzado. Además, la dirección del balón puede desviarse fácilmente, haciendo más impredecible su trayectoria.

 

Orígenes del fútbol de pantano

Este deporte no es muy popular alrededor del mundo, sin embargo, existen algunas locaciones donde se practica de forma habitual.

Se dice que sus orígenes se dieron en Finlandia en los años 90, donde era una práctica usada con fines militares para entrenar soldados y atletas de alta exigencia, ya que se requiere de una excelente condición física para tener éxito en este tipo de deporte.

En la actualidad, es común en algunas poblaciones, como es el caso del pueblo ruso de Pogy, ubicado a unos 60 kilómetros de San Petersburgo, donde se celebran comúnmente torneos de este curioso fútbol.

Su popularidad se ha extendido al punto que existen campeonatos mundiales de fútbol de pantano, celebrados habitualmente en Escocia y Finlandia, donde se llevan a cabo la Copa del Mundo y el Campeonato del Mundo respectivamente.

 

Reglas

El reglamento del fútbol de pantano es un poco diferente respecto a las reglas del fútbol habitual, dadas las condiciones de su práctica:

1. También se juegan dos tiempos, pero su duración es de 12 minutos por cada uno.

2. El número máximo de jugadores por equipo es de 6.

3. Se permiten hacer tantos cambios como se desee, ya que la exigencia puede agotar el rendimiento del jugador en muy poco tiempo.

4. Los tiros de balón parado (penaltis, tiros libres, saques de banda y tiros de esquina) se ejecutan dejando caer la pelota directamente sobre el pie, no en la superficie del terreno.

5. No existe el fuera de juego.