Aunque parezca increíble, lo cierto es que el Real Madrid, equipo que se caracteriza por su épica y por sus remontadas imposibles, quedó eliminado de la Copa del Rey en las dos ocasiones en las que perdió por 1-2 en la ida en su estadio.
La primera vez fue en 1995, cuando el Valencia ganó por ese resultado en el Santiago Bernabéu.
El Real Madrid no sólo no remontó en el partido de vuelta disputado en Mestalla, sino que también perdió aquel partido por 2-1.
El segundo precedente es más cercando.
Sucedió en 2012 en la eliminatoria de cuartos frente al FC Barcelona.
El conjunto azulgrana ganó en el Santiago Bernabéu y posteriormente hizo valer el resultado de la ida sacando un empate a dos en el Camp Nou.
Pero las estadísticas están para romperlas, y si algo ha demostrado el Real Madrid de Zidane, CR7, Ramos y compañía, es que nunca, absolutamente nunca, se le puede dar por muerto.
Los jugadores del conjunto blanco no están acostumbrados a perder y su ambición no conoce límites.
Si hay algo seguro, es que todos y cada uno de ellos se dejarán la piel en el partido de vuelta en el estadio del Celta para cosechar un buen resultado y seguir adelante en la competición copera.