El escritor más precoz en llevarse el premio literario más importante del mundo fue Rudyard Kipling, quien en 1907 logró el Nobel de Literatura cuando únicamente contaba con 42 años.
Además, también fue el primer literato británico en ganarlo.
Según la Academia sueca, Kipling se mereció el premio por su «capacidad de observación, originalidad de la imaginación, la virilidad de ideas y talento notable para la narración que caracterizan las creaciones de este autor de fama mundial«.