La leyenda del jorobado de la catedral de Notre Dame es uno de los elementos más populares de la cultura francesa.
Su historia ha fascinado a varias generaciones gracias a la literatura y el cine, aunque a lo largo de los años se ha ido moldeando a partir de la vida de un personaje que existió en realidad.
Y es que la galería ‘Tate’ de Londres posee un documento que alude a la identidad del verdadero Quasimodo que inspiró a Víctor Hugo para escribir su famosa obra.
El mismo pertenece a una autobiografía manuscrita del escultor británico del s.XIX Henry Sibson, quien trabajó en la remodelación de la catedral en el año 1820.
En este se texto se alude a la existencia de un escultor que trabajaba para el Gobierno y que se caracterizaba por ser jorobado, aunque su autor no recordaba su nombre y decía llamarle monseiur le Bossu (‘Señor Jorobado’).
Se da la casualidad que Víctor Hugo vivió en aquellos años en el mismo distrito en el que trabajaban los escultores y tallistas implicados en la remodelación de la catedral; por lo que es muy probable que fuera inspirado en este obrero jorobado para crear una de sus obras más universales.
Pregunta formulada por: Beatriz López Muñiz (La Rioja)