El mundo de la comunicación electrónica se ha asentado de la sociedad actual desde hace unas décadas atrás.
Pero los mensajes que se enviaban a través de correo electrónico o de los primeros dispositivos móviles carecían de sentimientos y emociones, por lo que en ocasiones los mensajes podían ser confusos.
Esto, sumado a la falta del uso correcto de los signos de puntuación, provocaba que en ocasiones la información que se quería expresar fuera confundida y mal interpretada. Por tanto, el japonés Shigetaka Kurita comprendió en el año 1999 que era necesario implementar ciertos caracteres que le proporcionaran emociones a los textos.
Shigetaka Kurita era empleado de una de las mayores operadoras de telefonía de Japón, donde logró evidenciar el grave problema de comunicación que existía. Por tanto, se propuso a crear una serie de emoticonos que representaran distintas emociones para mejorar el sistema de comunicación escrito.
En un principio se crearon solo 176 emojis; pero progresivamente se popularizó su uso al punto de ser utilizados por casi todas las plataformas de comunicación y redes sociales de la actualidad, donde se han ido incorporando más y más emoticonos.
Origen de la palabra emoji
“Emoji” es una palabra japonesa que deriva de dos frases: “e” que significa dibujo, y “moji” que se traduce como letra carácter. Esta definición responde a su principal uso, pues en sus inicios, los emoticonos servían para expresar claramente mensajes, reduciendo la cantidad de caracteres que se usaban, que en un principio eran limitados. (https://www.vidaliaonion.org)
Hoy en día los emojis se usan como una alternativa de comunicación global, pues permiten expresar emociones o reacciones sin necesidad de usar el lenguaje escrito. Esto ha contribuido a que se pueda establecer comunicación entre personas de distintas nacionalidades, sin tener que saber necesariamente su mismo idioma.