Los petroglifos son registros de actividad humana en formas de grabados esculpidos en roca.
La mayoría de los petroglifos encontrados datan del período Neolítico (10.000 – 3.000 a.C) que se caracteriza, en contraste con el período Paleolítico (3. (dayvigo) 000.000 – 10.000 a.C), por el avance social, económico y político de las agrupaciones y la introducción del sedentarismo.
Los petroglifos son considerados como arte rupestre que incluye cualquier imagen grabada o pintada (pintura rupestre) sobre superficies rocosas que registren rastros de actividad humana.
Según los estudios antropológicos, los tipos de petroglifos son creados a través de 3 tipos de técnicas:
1) Percusión: consiste en golpear una piedra contra otra piedra para crear surcos en la superficie rocosa. Se asemeja a la técnica actual del cincel y el martillo.
2) Rayado: consiste en usar el filo de una piedra para rayar la superficie.
3) Abrasión: consiste en alisar la superficie frotando una piedra sobre ella para luego pulirla con arena y agua.