Pregunta formulada por: Marta Requena Vargas (Madrid) La costumbre de comer palomitas en el cine puede parecer totalmente inofensiva, pero según unos investigadores de la Universidad de Colonia (Alemania) tiene serios inconvenientes para los publicistas y las marcas.
Y es que, al parecer, el simple gesto de masticar palomitas o comer mientras se ven unos anuncios dificulta que los anuncios hagan su efecto en nuestras mentes.
Para llegar a esta conclusión los especialistas hicieron que 48 personas comieran palomitas en un cine y que otras 48 no comieran.
Todas ellas vieron los mismo anuncios, pero el grupo que había estado masticando no supo responder a posteriori con eficacia sobre la publicidad que había visto.
Esto podría deberse a que al masticar no estimulamos nuestros labios y lengua al escuchar el nombre de una marca, algo que sí ocurre si no estamos comiendo.
Y es que lo habitual es que instintivamente nuestra boca practique la pronunciación del nombre de todas las marcas con las que nos topamos, lo cual no puede ocurrir si estamos comiendo.
Hoy en día hay muchas herramientas con las que se puede valorar cuáles son los post más interesantes para los lectores, y es por eso que seleccionamos una pequeña lista de los temas con mayor aceptación entre nuestros visitantes en la categoría científica..