Tema enviado por Laura Abad (El Vendrell, Tarragona)
Habitualmente se suele pensar que los seres humanos son los únicos animales capaces de tener sentimientos.
Sin embargo, la realidad está llena de ejemplos de que los animales también puede experimentar estas emociones. Es el caso de Lily, una Gran Danés que que quedó ciega hace cinco años por una rara enfermedad y acabó perdiendo sus dos ojos. Un gran problema que ha aprendido a superar gracias a la ayuda de otro Gran Danés, Maddison. Este perro es ahora su fiel compañero y se ha convertido en sus ‘ojos’, tal y como demuestran estas imágenes. Sin duda, toda una lección de vida para muchas personas. |
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