Time-out: ¿Cómo mejora el rendimiento en las prácticas deportivas?

Todos sabemos que necesitamos descansar para recuperarnos de las rutinas del día a día. Este simple concepto también aplica a las prácticas deportivas. Ya que luego de hacer un entrenamiento intenso o posterior a participar en una competencia es necesario la regeneración de la fuerza gastada.

Solíamos pensar que el progreso solo se puede sentir con actividad física regular, pero esta es una afirmación falsa. Ya que un descanso ofrece una función importante para optimizar el rendimiento deportivo.

En este artículo, hablaremos sobre cómo entender que debes descansar y por qué no debes dejar desatendidos estos signos del cuerpo.

¿Qué cambios ocurren durante el descanso?

Después de deportes intensos, las reservas de energía se agotan y el tejido muscular se deshidrata gravemente. En este caso, necesita supercompensación, un concepto que se usa activamente en el léxico deportivo y significa que durante el descanso de los deportes, las lesiones menores y los microtraumas se curan, y el cuerpo vuelve al estado que tenía antes del entrenamiento.

El descanso de calidad ayuda a potenciar el estado inicial del cuerpo y lo prepara para la siguiente tarea, mejorando los niveles de rendimiento. Si es razonable distribuir períodos de estrés y descanso, con el tiempo el rendimiento del cuerpo aumentará y las habilidades existentes alcanzarán la perfección.

¿Cómo entender que necesitas un tiempo muerto?

Descuidar el descanso afecta no solo una disminución en el nivel de rendimiento. La persona se vuelve demacrada, se vuelve susceptible a las infecciones y, con mayor frecuencia, experimenta dolores musculares y articulares. Además, la falta de descanso afecta negativamente el equilibrio hormonal: el nivel de hormonas de crecimiento disminuye y las hormonas del estrés aumentan. Además, en el contexto de la inestabilidad hormonal, pueden ocurrir problemas de peso.

Cuando te sientes cansado, necesitas urgentemente tomar un descanso, un día libre o irte de vacaciones. Los signos de que necesita relajarse son una sensación de letargo constante, ansiedad de fondo incomprensible, falta de interés en actividades que antes amaba, falta de vigor, a pesar de dormir bien, irritación constante consigo mismo, con las personas y el mundo que lo rodea.

Si el descanso no ayuda, busque ayuda de un psicólogo. Quizás en tu caso un descanso no sea suficiente y necesites el apoyo de un especialista.