La actriz Melanie Griffith puede presumir de haber heredado de su madre, Tippi Hedren, su pasión por los animales.
No en vano, tanto su progenitoria como ella protagonizaron en 1981 el filme ‘El Gran Rugido‘ en el que compartieron cámara con una docena de leones africanos.
Fue un trabajo único, pero a la vez peligroso, pues incluso la vida de la joven intérprete llegó a pender de un hilo tras sufrir el ataque de un león durante el rodaje.
A consecuencia de este incidente, Melanie tuvo que ser intervenida y recibió hasta cincuenta puntos de sutura en la cara.
Pero a pesar de lo ocurrido, la actriz no le cogió miedo a estos animales.
Es más, sorprendentemente en 1983 tanto Tippi como su hija adoptaron durante un tiempo en su casa un león llamado ‘Togar’.
Tan curiosa fue la situación que la revista ‘Life’ llegó a realizar un reportaje fotográfico de esta historia, aunque el animal no duró mucho tiempo en la masión.
Y es que los funcionarios de San Francisco les prohibieron tener esta mascota en casa, por lo que no les quedó más remedio que deshacerse de él y devolverle a la reserva de Shambala (California), la cual era propiedad de la propia Tippi Hedren.
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