En 1944 Humphrey Bogart y Lauren Bacall se conocieron con motivo del rodaje de la película ‘Tener o no tener’.
El actor tenía ya por entonces 44 años, mientras que ella solo era una joven de 20 años que se prestaba a hacer su debut en la gran pantalla.
Sin embargo, la diferencia de edad no impidió que la química surgiera entre ambos, tanto delante de las cámaras como detrás de ella.
La propia Bacall contó en sus memorias ‘Por mí misma y por un par de cosas más’ que su historia surgió ·»de forma imperceptible.
Llevábamos ya unas tres semanas de rodaje y se acababa la jornada.
Me quedaba una última toma y me había sentado en el tocador del camerino portátil a peinarme cuando entró ‘Bogie’ a despedirse.
Se colocó a mi lado, bromeamos como siempre y de repente de inclinó, me puso la mano debajo de la barbilla y me dio un beso».
Así, ambos se casaron un año después y Bogart quiso hacerle un regalo muy especial a la que se había convertido en su cuarta esposa.
El actor le entregó un silbato de oro que tenía la frase grabada al dorso: «Si me necesitas, silba».
La explicación era sencilla: en la película en la que se conocieron el protagonista encargando por Bogart le dice al personaje que interpreta Bacall «conmigo no tienes que fingir.
No tienes que decir nada. Si me necesitas, silba.
¿Sabes silbar, no? Junta los labios y soplas». Fue toda una demostración de que a veces las películas se pueden convertir en realidad. (https://www.enov8.com)
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