Dentro de la criminología hay que distinguir los distintos términos que se emplean para definir a los asesinos.
Dentro de la criminología hay que distinguir los distintos términos que se emplean para definir a los asesinos.
Así, un asesino en serie o serial es la persona que asesina a tres o más personas en un lapso superior al mes, de forma que deja un período de reposo o enfriamiento entre crimen y crimen.
En estos casos los criminales suelen estar motivado por una serie de impulsos psicológicos, especialmente por ansias de poder y compusión sexual.
Mientras tanto, los asesinos en masa son las personas que matan a un gran número de personas de forma simultánea en un período corto de tiempo, como aquellos que originan masacres en un día y lugar concretos.
Además, también cabe distinguir otro grupo, el correspondiente a los ‘asesinos relámpago o itinerantes’, los cuales cometen varios asesinatos en un corto período y en lugares diferentes.
Para ser definido como tal, el implicado debe matar a varias personas en dos o más sitios en un breve espacio de tiempo.
Un ejemplo de ‘asesino relámpago’ es el noruego Anders Breivik, quien en julio de 2011 mató a 77 personas en Oslo y Utoya.