Se basa en cortar o bloquear los conductos deferentes encargados de conducir los espermatozoides desde los testículos a la uretra.
La vasectomía es uno de los métodos anticonceptivos masculinos de más éxito.
El mismo se basa en cortar o bloquear los conductos deferentes encargados de conducir los espermatozoides desde los testículos a la uretra, de forma que estas células sexuales no sean expulsadas durante la eyaculación y, por tanto, no puedan fecundar el óvulo.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) cerca del 10% de los hombres del mundo se han sometido a esta pequeña intervención, aunque un reciente descubrimiento ha puesto en duda que se trate de una técnica sin ningún tipo de riesgo para la salud del paciente.
Y es que un trabajo realizado por la epidemióloga Kathy Wilson de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard ha evidenciado que los hombres que se someten a vasectomía son hasta un 20% más propensos a ser diagnosticados de un cáncer de próstata agresivo.
Además, el riesgo de fallecer por esta enfermedad se incrementaba en un 19% en los casos de los hombres que se habían realizado esta operación.
Por ello la investigadora recomienda profundizar en el estudio de esta aparente relación, pues de momento sus descubrimientos se limitan a meras observaciones sobre un grupo de control de 50.000 hombres entre 1986 y 2010.
