Tradicionalmente se ha conocido como enfermedad de ‘gota’ al exceso de ácido úrico en sangre.
Este elemento químico se crea en el organismo cuando se descomponen sustancias denominadas como ‘purinas’, aunque la mayor parte del mismo se disuelve en la sangre y es expulsado a través de la orina tras ser procesado por los riñones.
Sin embargo, en las ocasiones en los que se produce en demasiada cantidad puede provocar una hiperuricemia, es decir, la existencia de altos niveles de ácido úrico en el cuerpo.
Cuando esto sucede esta sustancia se deposita en forma de cristales en el interior de las articulaciones, provocando hinchazón y severos dolores en determinadas zonas del cuerpo, especialmente el dedo gordo del pie.
El origen de este problema puede estar tanto en una dieta desequilibrada como en una predisposición genética a padecerla, pues la muerte de las propias células puede provocar su formación.
Así, para controlar esta enfermedad cuando aparece se suele recetar un tratamiento que combina el empleao de fármacos con una dieta en la que no hay alimentos prohibidos, aunque sí se ponen límites.
«Lo importante de la dieta en la gota es que sea equilibrada, baja en calorías e incluya ejercicio físico para mantener el peso ideal» asegura la doctora Mercedes Jiménez Palop, del Servicio de Reumatología dle Hospital Puerta de Hierro.
Por ello, los expertos recomiendan comer frutas y verduras, seguir una dieta baja en grasas, moderar los azúcares añadidos y la fructosa de los refrescos, así como la ingesta de alcohol, especialmente de cerveza.
