Estos animales suelen girar para ver lo que les rodea.
Todo aquel que tenga un perro o perra estará acostumbrado a ver cómo su mascota hace unos curiosos giros sobre sí mismo antes de sentarse o tumbarse sobre el suelo.
La explicación a esta costumbre es simple, ya que se trata de un ritual innato que hacen por simple instinto de supervivencia.
Esto se debe a que sus ancestros estaban acostumbrados a hacer estos movimientos para asegurarse de que el lugar donde iban a reposar era lo suficientemente cómodo y no estaba poblado de algún objeto incómodo o de otros animales como insectos, parásitos o serpientes.
Así, también suelen hacer estos giros antes de defecar u orinar, por lo que son totalmente normales.
En cambio, si los hacen de forma insistente u obsesiva puede deberse a un estado de ansiedad o agitación por algo que les rodea o les ha sucedido recientemente.