James Harris es un australiano de 78 años al que muy poca gente conoce. Sin embargo, gracias a su colaboraciónél en día viven más de 2 millones de personas en el mundo, pues este hombre es uno de los mayores donantes de sangre de toda la historia. Todo comenzó en 1949, cuando a los 13 años sufrió una operación tras la que necesitó varias transfusiones de sangre. A raíz de ella estuvo convaleciente durante tres meses, pero prometió que cuando llegase a adulto dedicaría su vida a donar sangre para otras personas en su misma situación.
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Estas palabras las cumplió en 1954 haciendo su primera donación, aunque con el tiempo los médicos descubrieron que su sangre no era normal. En concreto la misma contaba con un anticuerpo muy poco habitual que prevenía la muerte de recién nacidos por la llamada ‘Incompatibilidad Rh’, una enfermedad anémica (enfermedad de Rhesus) que se produce cuando la madre tiene Rh+ y su bebé Rh-. Así, Harrison se dio cuenta de que en su caso las donaciones eran más importantes que las de otras personas, pues su sangre podía salvar a más gente. por ello a lo largo de 50 años este hombre ha donado sangre más de 1.000 veces y se calcula que con ella ha ayudado que cerca de dos millones y medio de bebés salven de su vida. Por ello ha sido condecorado con la Orden de Australia e incluso llegó a estar nominado para ser el australiano del año.
Sin embargo, según el doctor Eduardo Muñiz-Díaz, jefe de la División de Inmunohematología del Banco de Sangre y Tejidos de Cataluña (BSTCAT), su caso es uno más de los «miles de personas en el mundo con RH- que, de forma voluntaria, son inmunizadas para que creen anticuerpos en el plasma. Más tarde ese mismo plasma es utilizado por las farmacéuticas para fabricas una vacuna anti D que evita la aparición de la enfermedad de Rhesus en los niños. Probablemente la noticia sea que le han homenajeado por ser el donante que más veces ha donado, pero en ningún caso ha salvado él solo la vida de 2,2 millones de niños«. De esta forma quizás sea exagerado considerarle uno de los mayores héroes de la historia humanidad, aunque sin duda que su gesto merece un reconocimiento y la admiración de todo el mundo.
